El nuevo modelo de salud afecta a docentes

El sistema de salud colombiano ha sido durante mucho tiempo objeto de críticas y controversias, y las y los maestros del país no son ajenos a esta realidad. En medio de los cambios anunciados por el Gobierno Nacional en la prestación de servicios de salud, miles de maestros y maestras se encuentran en una situación desesperada, con tratamientos demorados y sin respuestas claras ni oportunas.

Desde que se empezó a implementar el nuevo sistema de salud del Fomag (Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio) el pasado 1 de mayo, las denuncias de los profesores han sido constantes. En el centro médico Servisalud QCL ubicado en el Campín, por ejemplo, se han reportado aglomeraciones de usuarios y docentes en busca de soluciones a sus requerimientos o trámites en salud. La docente Ana Patricia Alvarado, por ejemplo, lamenta la falta de información: “No hay suficiente información, no sabemos dónde sacar cita con especialistas”, afirmó.

Aide Bernal, exdocente y usuaria de Servisalud, denuncia la escasez de medicamentos: “No hay medicamentos porque tienen un nuevo contrato”. La falta de acceso a medicamentos y tratamientos es una realidad que afecta a muchos maestros y que pone en riesgo su salud y bienestar.

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La situación se agrava en la sede de la Fiduprevisora ubicada en Chapinero, donde José Milton Guzmán, gerente de Salud Fomag, reconoce la angustia de los usuarios: “Las personas, sobre todo los cuidadores de personas con situaciones complejas como el cáncer o una insuficiencia renal están tensos y eso es normal”, denunció el funcionario.

Una usuaria del servicio de salud relató que: “Hoy asistí a la cita, pero resulta que el médico me dice que no me puede hacer ningún examen ni nada a pesar de que siento un cuerpo extraño en la garganta desde hace tiempo”, comentó.

Según cifras del Ministerio de Educación, la mayoría de las y los maestros afectados por esta crisis tienen más de 50 años de edad, lo que hace más crítica la situación. 

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En medio de esta problemática, las y los maestros del Magisterio exigen respuestas claras y soluciones inmediatas. Hacen un llamado para implementar mejoras en el nuevo sistema de salud, esperando procedimientos concretos que solucionen el problema.

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Por David Bautista Dorado.